La brújula y las cartas náuticas para navegar en un archipiélago de certezas y un océano de incertidumbre.
A la educación –al sistema educativo actual– le llueven las críticas por los cuatro costados, (Ken Robinson, Jeremy Rifkin, entre otros autores), por su obsolescencia, por su falta de coherencia, por su currículo inadecuado para hoy, por su falta de actualización en el paradigma y en sus métodos. Las orientaciones y recomendaciones actuales (UNESCO, PISA, evaluaciones internacionales, etc.) apuntan a un necesario y urgente cambio de paradigma pedagógico.